Así ha sido el examen de Historia de España en la Selectividad de Andalucía 2025
Los estudiantes se enfrentaron a un formato renovado con dos itinerarios que abarcaban desde la caída del reino nazarí de Granada hasta la crisis del 98
Un editorial de El País, en el examen de Lengua y Literatura II de la Selectividad 2025 en Andalucía

El segundo examen de la convocatoria ordinaria de la Selectividad 2025 en Granada ha sido el de Historia de España, una prueba que ha presentado importantes novedades en su estructura y que ha puesto a prueba los conocimientos de los estudiantes de la provinica sobre algunos de los episodios más relevantes de la historia nacional.
Con una duración de hora y media, el examen se ha articulado en tres bloques diferenciados, manteniendo un sistema de itinerarios que permite cierta flexibilidad en la elección de contenidos.
La caída del reino nazarí, en el arranque
Todos los estudiantes, de Granada y el resto de Andalucía, han comenzado respondiendo al Bloque I, valorado con 2 puntos, que planteaba dos cuestiones de carácter general. La primera pregunta exigía precisar brevemente las etapas de la dominación musulmana en la península, un tema clásico que abarca desde la conquista del 711 hasta la caída del reino nazarí de Granada en 1492. La segunda cuestión se centraba en explicar la figura del valido y su importancia en el siglo XVII, haciendo referencia a personajes como el Conde-Duque de Olivares o el Duque de Lerma, figuras clave en la monarquía hispánica durante el reinado de Felipe III y Felipe IV.
Dos caminos divergentes: del liberalismo a la autarquía
La principal novedad estructural del examen residía en la posterior elección entre dos itinerarios claramente diferenciados. El Itinerario A se centraba en periodos más contemporáneos, mientras que el Itinerario B abarcaba desde los inicios del liberalismo hasta la crisis colonial de finales del siglo XIX.
En el Itinerario A, los estudiantes se han enfrentado a documentos de máxima actualidad histórica. El primer documento reproducía un fragmento de la obra "Los latifundios en España" de Pascual Carrión, publicada en 1932, que denunciaba cómo "unos 7.000 propietarios posean más de 6 millones de hectáreas en las regiones manchega, extremeña y andaluza", describiendo las consecuencias sociales y económicas de esta concentración de la propiedad: "despoblación de los campos, deficiente cultivo, jornales bajos, arrendamientos caros".
La reforma agraria y el acorazado Maine
Como alternativa en el mismo itinerario, se presentaba una ilustración histórica relacionada con la Constitución de 1812, exigiendo a los estudiantes contextualizar este hecho fundamental del liberalismo español y desarrollar su importancia y consecuencias. El segundo documento del Itinerario A mostraba una imagen del acorazado Maine, conectando directamente con la crisis colonial de 1898 y la guerra hispano-estadounidense.
Por su parte, el Itinerario B ofrecía una perspectiva diferente con un texto del "Fuero de los Españoles" de 1945, un documento fundamental del régimen franquista que establecía las bases jurídicas del Estado autoritario. El fragmento incluía artículos significativos como el que establecía que "los españoles deben servicio fiel a la Patria, lealtad al Jefe del Estado y obediencia a las leyes", o el que permitía expresar ideas "mientras no atenten a los principios fundamentales del Estado".
Entre la revolución de 1917 y las Cortes de Cádiz
El Bloque III, valorado con 4 puntos, culminaba el examen con temas de desarrollo extenso. Los estudiantes del Itinerario A podían elegir entre "La revolución de 1917 y la crisis del sistema político de la Restauración" o "La creación del Estado franquista: bases ideológicas, autarquía y consolidación (1939-1959)". Este último tema resulta especialmente relevante en el contexto actual, abordando la construcción del régimen autoritario y su evolución durante las dos primeras décadas.
Los estudiantes del Itinerario B se enfrentaban a una disyuntiva entre "Los inicios del Liberalismo en España. Las Cortes de Cádiz y la Constitución de 1812" y "Guerra colonial y crisis de 1898", dos hitos fundamentales que marcaron el tránsito del Antiguo Régimen al mundo contemporáneo y el final del imperio colonial español respectivamente.
Una prueba exigente en rigor académico
La estructura del examen ha demostrado una clara intención de evaluar tanto los conocimientos factuales como la capacidad de análisis y contextualización histórica. Los documentos seleccionados no eran meramente ilustrativos, sino que exigían un trabajo profundo de comentario de texto, identificación de ideas principales y contextualización en sus respectivos marcos históricos.
Profesores especializados en la materia han destacado que la selección de contenidos refleja una apuesta por los grandes temas estructurales de la historia española, desde la cuestión agraria hasta los procesos de construcción del Estado liberal y la crisis del sistema político de la Restauración.
Impacto en las estrategias de preparación
Este formato consolida la tendencia hacia una evaluación más competencial, donde no basta con memorizar datos, sino que se requiere una comprensión profunda de los procesos históricos y la capacidad de relacionar diferentes épocas y problemáticas. Los estudiantes han tenido que demostrar destrezas en el comentario de fuentes documentales, tanto textuales como iconográficas.
La inclusión de temas como los latifundios o el Fuero de los Españoles evidencia la voluntad de conectar la historia con problemáticas de larga duración que han marcado la evolución de la sociedad española. Los resultados de esta prueba, que se conocerán junto al resto de calificaciones entre el 11 y 13 de junio, permitirán evaluar cómo los estudiantes han asimilado esta nueva metodología de evaluación histórica.
También te puede interesar
Contenido ofrecido por santander smusic
Contenido ofrecido por fundación telefónica
Contenido ofrecido por Icónica Santalucía Sevilla Fest